Ante el proceso de descolegiación en los COAs planteamos que se debe y se puede reducir la cuota colegial un 21% sin mermar las prestaciones. ¿Sabías que la ley permite exime de IVA a las cuotas colegiales? ¿por qué nos la cobran y más ahora que los servicios extras se deben cobrar aparte?

Desde la asociación de Arquitectos (aA) entendemos que la estructura colegial ha de ser una herramienta que nos ayude a ejercer la profesión. En ningún caso debería ser un lastre económico o estructural.  El ajuste económico  que estamos viviendo en el Colegio puede ser necesario, pero no suficiente.

-          Es urgente involucrar a las nuevas generaciones en el Colegio. Es la única garantía de supervivencia.

-          Pero no solo a los recién titulados. Debería primar el principio de que cuantos más profesionales nos involucremos en el Colegio mejor, tanto por el capital humano como por la mayor riqueza de perspectivas y, por tanto, de soluciones.

-          Hay que adecuar los Estatutos que rigen el funcionamiento del colegio a las realidades profesionales y tecnológicas de hoy. Cuando se redactaron, no existía la firma digital, la mayoría de los arquitectos eran profesionales en ejercicio libre de la profesión y el panorama administrativo y legal era muy diferente.

-          La gran mayoría de nosotros debemos reconvertir nuestra labor profesional. Si el Colegio no nos ayuda a cambiar o no se adecúa a nuestra nueva realidad profesional, ocurrirá lo que por desgracia  está sucediendo: la descolegiación. Justo es en momentos de mayor debilidad cuando nos interesa contar con una estructura fuerte y profesional que nos respalde.

-          No estamos solos en el mundo. No inventemos la rueda. Somos más de 50.000 arquitectos colegiados, probablemente otros tantos no colegiados y estudiantes. Seguro que juntos logramos más cosas que por separado.